jueves, 15 de septiembre de 2011

RESCATADOS

"Líbrame en tu justicia, y rescátame; inclina a mí tu oído, y sálvame." (Salmo 71.2)

No todos los afligidos son humildes de espíritu. Pero cuando muestran su dependencia en el Señor Jesús, su grito llega al trono del Altísimo y hay salvación.

La justicia de Dios, tarde o temprano se manifiesta en la vida de aquellos que le invocan con sinceridad.

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Me gusta leer la Biblia todos los días por la mañana y por eso he decidido compartir lo que Dios me habla a través de este blog.

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