jueves, 6 de diciembre de 2012

Vanidad

"Efraín está oprimido, violados sus derechos, porque quiso andar en pos de vanidades." (Oseas 5.11)

Todos los seres humanos tienen por lo menos un mínimo de vanidad. Esto es común a la naturaleza humana. Sin embargo, lo que no es aceptable por Dios es que la vanidad conduzca los pensamientos. 

Los pensamientos de los fieles deben ser guiados por los pensamientos de Dios. Efraín prefirió caminar según la vanidad de su corazón, lo que desagradó al Señor y le trajo graves consecuencias.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

hay muchos que exageran y van al extremo con no se cuantas cirugias plasticas, otros que solo se preocupa con la moda y dejan las cosas de Dios de lado.

Sea Bienvenida




Me gusta leer la Biblia todos los días por la mañana y por eso he decidido compartir lo que Dios me habla a través de este blog.

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